Su deterioro es lamentable y evidente. Internet dice que está destruida.
Si tuviéramos que escoger a la serie que más sedujo a los televidentes por la belleza y sensualidad de sus protagonistas, Guardianes de la Bahía probablemente estaría en la cima de la lista.
Y es que cuando se combina la playa, el sol, los bikinis y actrices como Pamela Anderson y Carmen Electra, la temperatura puede llegar a un calor inimaginable. Ahora bien, las dos mujeres recién nombradas no fueron las únicas que le dieron el toque de sensualidad a la teleserie en cuestión, Yasmine Bleeth fue sin lugar a dudas la tercera integrante de este trío que cautivó a todos los hombres que tuvieron la fortuna de seguir la historia de estas hermosas socorristas. Y sí, no hubo nadie que no se asombrara, por su ternura e inigualable belleza, con esta aparentemente desconocida actriz llamada Yasmine Bleeth.
Te mostramos cómo lucía ella en la época en que Baywatch causaba una verdadera sensación.
La actriz se hizo famosa cuando tenía apenas 20 años gracias a su papel en Guardianes de la Bahía.
Nació en Nueva York, Estados Unidos.
Y sí, en ese entonces deslumbraba con su belleza. Sin embargo, el paso del tiempo evidentemente hace que todos vayamos luciendo cada vez más viejos.Es normal y no hay nada de malo en ello. El problema, no obstante, se produce cuando uno acelera dicho proceso con los malos hábitos.
Eso fue exactamente lo que le ocurrió a Yasmine con el paso de los años. Ella generó una aguda adicción al alcohol y a la cocaína. Se sumergió en la oscuridad de las drogas y, a pesar de haber entrado a centros de rehabilitación en numerosas oportunidades, su grave dependencia continúa jugándole malas pasadas. Una de ellas es su apariencia física que si bien no es lo relevante, sí refleja el deterioro interno que está experimentando.
Mira cómo luce Yasmine a sus actuales 49 años.
A pesar de que ella tiene un problema que nunca nadie puede juzgar y que, en vez, debería ser apoyado desde todo lugar, Internet no ha tenido piedad. Las críticas han hecho alusión a lo deteriorada que se encuentra en la actualidad. Dicen que está destruida.
Pero el problema, claramente, no es su apariencia física, sino que la adicción a las drogas que seguramente está impidiéndole ser feliz y llevar una vida sana.
Esperamos que logre superar la dependencia al alcohol y las drogas.